Cómo leéis, el investigador Yen-Hsun de la Universidad de Taiwan, propone un método para eliminar las farolas de las calles. El profesor y su equipo bañaron las hojas de una planta llamada Bacopa caroliniana con una solución de nanopartículas de oro. Al cabo de un par de días, las nanopartículas se extendieron por todas las células de la planta, provocando que cuando el vegetal fue expuesto a la luz los electrones del oro se excitaran, provocando que la clorofila de la planta emitiera un brillo luminoso visible.
Pero este no es el único proyecto en marcha de este tipo. En la Universidad de Cambridge, se pretenden crear árboles luminosos mediante la manipulación genética.
Simplemente increíble.